«Bendecido», la madurez para Peter Manjarrés

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Tan marcado quedó el estilo que Peter Manjarrés forjó con canciones como Amor de mi sabana y El papá de los amores, que al oír por primera vez La leona, se reconoce el toque festivo del cantante.

La canción, cuyo jocoso video fue protagonizado por Lorna Cepeda, es el primer sencillo del álbum Bendecido, con el que Manjarrés celebra sus 12 años de carrera, siete de estos con el acordeonista Sergio Luis Rodríguez.

Antes de conformar el dúo, Manjarrés cantó junto a Juancho de la Espriella y luego con Franco Argüelles. En ese intermedio vio crecer musicalmente al joven Rodríguez, que salió de Los Niños del Vallenato para destacarse como acordeonista y compositor.

De hecho, Voy con todo, la canción que le dio título al CD que Peter grabó con Argüelles, era composición de Rodríguez, que entonces rondaba los 18 años. Hoy, ambos han hecho un dúo exitoso: tienen dos Grammy Latinos y Rodríguez obtuvo el título de Rey Vallenato en el 2009.

“Nos sentíamos bendecidos por todo esto y por las giras y el cariño del público”, cuenta Manjarrés. Por lo mismo, buscaron una canción que pudiera llevar ese título. “Obviamente, la canción no dice en su letra: ‘gracias a Dios por los Grammy o el reinado de Sergio’. Giramos la temática hacia el amor, hacia la forma como uno se siente agradecido cuando consigue el amor”, agrega.

La canción fue composición de Felipe Peláez, compositor y cantante, con quien ha hecho una llave exitosa a la hora de componer.

Bendecido, además de La leona, explora los diferentes estilos del vallenato comercial; por ejemplo, El pum pum, de Ómar Geles, pensada para el público juvenil, iba a ser una fusión con reguetón, pero terminó por ser un vallenato con toque electrónico.

“Geles compuso para nosotros más de 20 canciones; nos mandaba y nos mandaba composiciones y nosotros no nos identificábamos con ellas, no porque fueran malas. En un momento dije: ‘A mí ya me da pena; grabamos la próxima que envíe’. Y precisamente fue la última en entrar al álbum”, dice.

Además, Manjarrés incluye varias canciones románticas. Ahora, con la trayectoria que tiene, confiesa que le costó mucho incursionar en ese vallenato, más cadencioso.

“Comencé con canciones alegres –afirma–, pero las letras siempre fueron románticas, aunque el ritmo sonara festivo. Pero llegó el momento en el que quise hacer un vallenato romántico, lento. Lo logré al fin, con el paso de los años, con Obsesión, la canción que más sonó del álbum Solo clásicos.”

Como curiosidad, Obsesiónera una canción que Peter no quería grabar. Lo intimidaba, porque había sido tan exitosa en versión de Las Estrellas Vallenatas, décadas antes, que temía volverla a grabar. Sin embargo, ahora su orgullo está en decir que niños y jóvenes que no conocieron la versión original, al oírla se acuerdan más de su versión.

“Con Obsesión descubrí que faltaba dramatizar la voz, meterle más sentimiento, cambiar el timbre, ser más suave”, dice el cantante.

Y cuenta otra infidencia: “Por mí, grabaría solo clásicos, pero mis álbumes se hacen pensando cada vez más en el público; por eso hablo de todas las temáticas y busco que haya canciones para todos”.

Peter Manjarrés ha visto crecer al acordeonero Sergio Luis Rodríguez (izq.), con quien lleva siete años trabajando y tiene seis discos y dos Grammy Latinos.

Fuente: Vive in – El Tiempo